En Noosa nos esperaba el segundo couchsurfing, esta vez una familia. Pieter, el padre nos paso a buscar por la estación de autobús a las 15.30h.
Llegamos a Nossa después de solo 2 horas de bus. Es un pueblo precioso, es como me imaginaba las playas de Australia, limpio, con gente chic en havaianas y eucaliptos por todos lados... mmmm!! todo huele a eucaliptos!!
Pieter llego en una camioneta 4x4 con mapas y folletos de Noosa que había recogido en el punto de información. Nos llevo hasta la casa, a 15 minutos a las afueras de la ciudad, en un barrio muy tranquilo.
Llegamos a una casa hermosa, grande con piscina y jardín. Y para nuestra sorpresa, nos instaló en una casita junto a su casa, con baño, cocina, habitación, etc... estábamos como reinas. La nevera llega de chocolates, cervezas y refrescos. Wifi y un proyector con películas. Mejor imposible!!
Pasamos la tarde en el jardín tomando café con pastel y charlando con Pieter, Jayne, su mujer, (ambos dos profesores) y Anneka, la hija de 14 años.
Resultamos ser las primeras couchsurfing, justo en el momento en que enviamos el mail acababa de registrase en la web de Couchsurfing como miembro. Y la verdad es que se los veía muy entusiasmados con la idea de tener a gente en la casa.
Les sorprendió que solo estuviésemos 2 noches, y con lo bien que estábamos, a nosotras también nos supo mal estar tan poco tiempo, nos sentimos tan a gusto que no hubiese estado nada mal quedarnos todo el tiempo que teníamos... pero aun nos queda mucho Australia por recorrer ;-)
Nos prepararon la cena, pasta y ensalada. No sé si es normal o no que lo hagan, pero fue una grata sorpresa.
Al día siguiente, nos despertamos muy temprano para ir al mercado con Jayne y Anneka. Pasamos toda la mañana ahí y volvimos a comer a la casa. Después de comer nos dejaron en la puerta del Parque Nacional de Noosa, y nos dijeron que les enviáramos un sms cuando quisiéramos que nos recojan.
Aquí nos encontramos con Lucile, nuestra amiga francesa, que acababa de llegar a Noosa.
En la puerta del parque vimos un koala y en el medio del camino vimos la primera (y espero que última) serpiente!!!
Después de recorrer el parque, y antes de enviar el sms para que nos recojan, fuimos a la heladería Massimo que nos recomendó Pieter a tomar el helado de la semana. Antes de volver a la casa, nos llevaron a la montaña a ver el atardecer.
Por la noche tuvimos la mejor velada que podíamos pasar. Una cena con langostinos y vino blanco. Y después de la excelente cena, vimos los videos de los viajes por Europa y Japón. Y para acabar, Anneka y Nick (el hijo de 16 años), se pusieron a cantar y tocar la guitarra, estuvimos hasta las tantas disfrutando del “concierto”.
Nos sentimos realmente a gusto con esta maravillosa familia. Realmente nos sentimos como en casa y por primera vez en Australia, no nos hemos sentido mochileras ;-)
Al día siguiente a las 8.30h cogíamos el bus para Rainbox Beach. Nos prepararon el desayuno, y salimos con Pieter de camino a la estación, pero antes pasamos por un campo de golf en busca de canguros, no encontramos ninguno... bu, bu!!
Aquí os dejo las fotos y algunos videos de Anneka, Nick y Mali cantando.
Noosa |